Identificar una pluma es algo relativamente sencillo porque cada época tiene características muy definidas. Digo época y no edad o fecha de fabricación, porque eso es digno de mayor detalle y amplio conocimiento, pero sí es fácil saber a qué época histórica industrial o, dicho en otras palabras, periodo técnico, corresponde una pluma. Ello es así porque, en el mundo de la estilográfica, ha habido diversas etapas muy marcadas en el aspecto tecnológico, lo cual permite a cualquier aficionado saber, más o menos, en qué tiempo se construyó una pluma atendiendo a los materiales con que está fabricada, sus formas, su mecánica y su estética.
Teniendo en cuenta lo anterior, puede decirse que la historia industrial de las plumas se resume en seis etapas que son las que a continuación se exponen. Sirvan ellas como pequeño compendio a fin de que los aficionados puedan tener una visión global y práctica de la historia de la estilográfica.
Teniendo en cuenta lo anterior, puede decirse que la historia industrial de las plumas se resume en seis etapas que son las que a continuación se exponen. Sirvan ellas como pequeño compendio a fin de que los aficionados puedan tener una visión global y práctica de la historia de la estilográfica.
La idea de esta entrada proviene de numerosos trabajos previos que he ido leyendo con el tiempo, pero, especialmente, del de Richard Conner que, en su página de Penspotters, denominada "The history of pens", hace una interesantísima relación de las características físicas de cada periodo. Doy aquí a Richard el crédito correspondiente.
1.- FINAL DEL SIGLO XIX (1880-1900)
A finales del S. XIX la estilográfica era un raro objeto de lujo al alcance de muy pocos y con una técnica enormemente limitada. Casi todas las plumas se parecían excepto en la decoración que se encargaba a artesanos distintos de los fabricantes a fin de dotarlas de acabados personalizados y lujosos. Fue la época del cuentagotas y de los overlays.
(foto: andersonpens)
Características destacadas:
(foto: officemuseum)
2.- LA BELLE EPOQUE (1900-1925)
El primer cuarto del S. XX asistió a una increíble proliferación de fabricantes de estilográficas, instrumento que había probado su utilidad y comenzaba a ser demandado por el público en general, más especialmente por una clase media y alta de ingresos saneados. Las marcas comenzaron a invertir en tecnología, diseño y materiales y ofrecieron una enorme variedad de modelos que inundaron los mercados. Algunos elementos, como el clip, se convirtieron en un complemento estándar y la tecnología hizo su aparición.
(foto: munson)
Características destacadas:
(foto: Wancher)
3.- LA EDAD DE ORO (1925-1950)
Tras el lapso de la Gran Guerra, los fabricantes de estilográficas dieron un salto cualitativo muy importante en el desarrollo del instrumento. Los principales avances fueron estéticos puesto que las plumas comenzaron a fabricarse en nuevos materiales que transformaron las viejas piezas oscuras en un abanico multicolor adaptando, de paso, la estética art dejó. Comercialmente hablando, la estilográfica se diversificó, ofreciendo una enorme variedad de precios y modelos, aptos para todos los bolsillos. Tecnológicamente, la pluma da pasos gigantescos con sistemas de carga de sofisticada mecánica como el vacumatic y, más adelante con hitos en el diseño como la Parker 51 o el plumín inlaid de Sheaffer.
(foto: penhero.com)
Características destacadas:
(foto: Pelikan)
(foto: ugletkin)
4.- LA DÉCADA DE LA INCERTIDUMBRE (1950-1960)
En 1942 había nacido el bolígrafo que, a partir de 1950, se convirtió en un poderoso competidor de las estilográficas. La diferencia de precio entre ambos instrumentos y las ventajas prácticas del bolígrafo, provocaron que los fabricantes de estilográficas se vieran obligados a rebajar sus costes. Esto marcó la postergación del celuloide en favor de resinas sintéticas más baratas y seguras, así como la utilización masiva de plumines de acero. La producción se automatizó y se hicieron enormes esfuerzos para simplificar diseños y mantener la clientela. Los modelos básicos se multiplicaron en numerosas variantes, menos caras, para conseguir acaparar el mercado. Tecnológicamente, las estilográficas dejaron de evolucionar.
(foto: FPN)
Características destacadas:
5.- LA CAIDA Y LOS AÑOS OSCUROS (1960-1990)
El bolígrafo se convirtió en el instrumento de escritura por excelencia. Su precio y su s ventajas prácticas le habían convertido en un vencedor nato. Los fabricantes de estilográficas arrojaron la toalla y abandonaron la inmensa mayoría de los modelos tecnológicamente más avanzados, arrinconando los sistema complejos de carga en favor del cartucho. El diseño se limitó a seguir el de los bolígrafos, con abuso del metal y abandono de los plásticos de calidad.
(foto: Richard Sapper)
Características destacadas:
(foto: FPN)
6.- EL RENACIMIENTO Y EL CAMBIO DE PARADIGMA (1990-hoy)
Durante los años 80 del pasado siglo, las grandes compañías desaparecieron absorbidas por diversos entramados de empresas que mantuvieron las marcas pero alteraron por completo su estructura económica tradicional. En cambio, renacen viejas marcas largo tiempo desaparecidas como Wahl Eversharp. Conklin o Esterbrook. Nace el interés por lo antiguo y por las ediciones especiales y conmemorativas, siempre dirigidas a un nuevo mercado de coleccionistas y aficionados que comienzan a girar, a partir de los años 90, en torno a internet. La distribución tradicional se hunde en favor de la red y nacen nuevas marcas orientadas al lujo aunque también surgen nuevas compañías orientadas a la pluma funciona como Franklin Christoph, Noodler's o Edison. La pluma deja de tener interés funcional para convertirse en un objeto de colección. Japón se consolida como el primer fabricante mundial.
(foto: Deb Herter)
Características destacadas:
(foto: Pilot)
Esto es todo. Espero que este modesto esquema sirva para excitar la curiosidad del lector y provocar su interés en aprender más así como aportar nuevas ideas.
1.- FINAL DEL SIGLO XIX (1880-1900)
A finales del S. XIX la estilográfica era un raro objeto de lujo al alcance de muy pocos y con una técnica enormemente limitada. Casi todas las plumas se parecían excepto en la decoración que se encargaba a artesanos distintos de los fabricantes a fin de dotarlas de acabados personalizados y lujosos. Fue la época del cuentagotas y de los overlays.
(foto: andersonpens)
Características destacadas:
- - El material universal de las plumas era la ebonita negra, lisa o grabada.
- - Sobre las plumas se colocaban overlays o entramados de metales preciosos, plata y oro, que adornaban el instrumento y lo enriquecían.
- - La forma típica era fina y alargada con extremos truncados.
- - Los capuchones no llevaban clip aunque podían encargarse luego a joyeros u orfebres.
- - El plumín era siempre de oro para evitar la corrosión que provocaban las tintas de la época.
- - El sistema de alimentación universal era el cuentagotas, es decir, que el cuerpo de la pluma contenía la tinta, la cual se introducía allí con ayuda de dicho objeto.
(foto: officemuseum)
2.- LA BELLE EPOQUE (1900-1925)
El primer cuarto del S. XX asistió a una increíble proliferación de fabricantes de estilográficas, instrumento que había probado su utilidad y comenzaba a ser demandado por el público en general, más especialmente por una clase media y alta de ingresos saneados. Las marcas comenzaron a invertir en tecnología, diseño y materiales y ofrecieron una enorme variedad de modelos que inundaron los mercados. Algunos elementos, como el clip, se convirtieron en un complemento estándar y la tecnología hizo su aparición.
(foto: munson)
Características destacadas:
- - El clip se convierte en un elemento presente en todas las plumas.
- - Se hacen pruebas con algunos materiales que pretendían introducir colores en las plumas, como la bakelita, la caserna o el celuloide, aunque sin éxito.
- - La pluma estándar sigue estando construida en ebonita aunque se comienza a usar en color rojo o moteado.
- - Nacen las plumas para señora, más pequeñas y con una anilla en el extremo superior del capuchón.
- - Surgen los sistemas de autoalimentación con depósito interior que se acciona con botones o palancas.
- - Nacen las safety-pens, o plumas de seguridad que evitaban que los cuentagotas perdieran tinta.
(foto: Wancher)
3.- LA EDAD DE ORO (1925-1950)
Tras el lapso de la Gran Guerra, los fabricantes de estilográficas dieron un salto cualitativo muy importante en el desarrollo del instrumento. Los principales avances fueron estéticos puesto que las plumas comenzaron a fabricarse en nuevos materiales que transformaron las viejas piezas oscuras en un abanico multicolor adaptando, de paso, la estética art dejó. Comercialmente hablando, la estilográfica se diversificó, ofreciendo una enorme variedad de precios y modelos, aptos para todos los bolsillos. Tecnológicamente, la pluma da pasos gigantescos con sistemas de carga de sofisticada mecánica como el vacumatic y, más adelante con hitos en el diseño como la Parker 51 o el plumín inlaid de Sheaffer.
(foto: penhero.com)
Características destacadas:
- - El celuloide se convierte en el material por excelencia, lo que abre las puertas a un mundo de color.
- - Las formas de las plumas se multiplican y se de cada modelo se ofrecen diversas variantes con diversos precios para alcanzar a todo el mercado.
- - Nacen sistemas de carga revolucionarios como el pistón, el vac-filler, el snorkel y el vacumatic y se mantienen la palanca y el botón en plumas de gama baja.
- - El diseño se basa en modelos tecnológicos y espaciales con ejemplares revolucionarios como la Parker 51
- - Nacen plumines mu originales como el carenado de la Parker 51 y los Inlaid e Imperial de Sheaffer.
- - Nacen las plumas de gama baja y materiales pobres para atender al sector menos favorecido de la población, especialmente, durante la Segunda Guerra Mundial.
(foto: ugletkin)
4.- LA DÉCADA DE LA INCERTIDUMBRE (1950-1960)
En 1942 había nacido el bolígrafo que, a partir de 1950, se convirtió en un poderoso competidor de las estilográficas. La diferencia de precio entre ambos instrumentos y las ventajas prácticas del bolígrafo, provocaron que los fabricantes de estilográficas se vieran obligados a rebajar sus costes. Esto marcó la postergación del celuloide en favor de resinas sintéticas más baratas y seguras, así como la utilización masiva de plumines de acero. La producción se automatizó y se hicieron enormes esfuerzos para simplificar diseños y mantener la clientela. Los modelos básicos se multiplicaron en numerosas variantes, menos caras, para conseguir acaparar el mercado. Tecnológicamente, las estilográficas dejaron de evolucionar.
(foto: FPN)
Características destacadas:
- - Uso de materiales más baratos para aquilatar el precio.
- - Uso generalizado del plumín de acero en las gamas asequibles.
- - Las resinas sintéticas arrinconan el celuloide a una producción marginal.
- - Los plumines se ofrecen en numerosos anchos para ofrecer variedad.
- - Simplificación de los diseños y abaratamiento de los acabados.
5.- LA CAIDA Y LOS AÑOS OSCUROS (1960-1990)
El bolígrafo se convirtió en el instrumento de escritura por excelencia. Su precio y su s ventajas prácticas le habían convertido en un vencedor nato. Los fabricantes de estilográficas arrojaron la toalla y abandonaron la inmensa mayoría de los modelos tecnológicamente más avanzados, arrinconando los sistema complejos de carga en favor del cartucho. El diseño se limitó a seguir el de los bolígrafos, con abuso del metal y abandono de los plásticos de calidad.
(foto: Richard Sapper)
Características destacadas:
- - Aparición del cartucho de plástico como sistema de carga universal, salvo para las plumas de gama alta.
- - Simplificación masiva del diseño y aprovechamiento de las bases de otros instrumentos como los portaminas o los bolígrafos.
- - Uso generalizado del metal para la construcción, en perjuicio de las resinas y otros plásticos.
- - Nacimiento de las primeras ediciones limitadas, especialmente de Parker.
- Comercialización de las llamadas plumas de estudiante, instrumentos muy baratos para competir con los bolígrafos.
6.- EL RENACIMIENTO Y EL CAMBIO DE PARADIGMA (1990-hoy)
Durante los años 80 del pasado siglo, las grandes compañías desaparecieron absorbidas por diversos entramados de empresas que mantuvieron las marcas pero alteraron por completo su estructura económica tradicional. En cambio, renacen viejas marcas largo tiempo desaparecidas como Wahl Eversharp. Conklin o Esterbrook. Nace el interés por lo antiguo y por las ediciones especiales y conmemorativas, siempre dirigidas a un nuevo mercado de coleccionistas y aficionados que comienzan a girar, a partir de los años 90, en torno a internet. La distribución tradicional se hunde en favor de la red y nacen nuevas marcas orientadas al lujo aunque también surgen nuevas compañías orientadas a la pluma funciona como Franklin Christoph, Noodler's o Edison. La pluma deja de tener interés funcional para convertirse en un objeto de colección. Japón se consolida como el primer fabricante mundial.
(foto: Deb Herter)
Características destacadas:
- - Las plumas se convierten en objetos de lujo con diseños intrincados en materiales preciosos.
- - Nacen reediciones de plumas clásicas como las Parker Duofold o 51, las Pelikan 100 o las Conway Stewart Duro.
- - Los precios de la gama alta se disparan hasta cotas nunca vistas.
- - Se divide el mercado entre el lujo, por un lado, y las plumas funcionales por otro.
- - Las Ediciones Limitadas o Especiales se convierten en un nuevo estándar de fabricación.
- - El uso de nuevos materiales y plásticos, así como el renacimiento de otros clásicos como el celuloide o la ebonita, hacen que el diseño de las estilográficas adquiera una variedad infinita.
- - El sistema de carga universal sigue siendo el cartucho/convertidor, pero acompañado de otros sistemas clásicos generalmente reservados para modelos de gama alta o lujo.
- El mundo del lujo apunta a los diseños japoneses.
(foto: Pilot)
Esto es todo. Espero que este modesto esquema sirva para excitar la curiosidad del lector y provocar su interés en aprender más así como aportar nuevas ideas.
Pues sinceramente no sé que tienen las plumas, pero empezaron siendo un útil diferente para mi vida diaria de estudiante y han acabado siendo una obsesión. La magia de las plumas, una pena que cuesten tan caras.
ResponderEliminarPor cierto, muy gran trabajo Pedro,sigue así :)
Gracias por tu comentario Jaime; un cordial saludo
EliminarDesde hace 60 años ningún avance... Veo una Livescribe 3 y pienso si Pilot no podría hacer algo similar con una capless. Internet nos ha sacado de la edad media, pero la electrónica está por explotar. Dejar la interfaz del cuaderno como algo inigualable y explotar las posibilidades de la informática en cuestión de almacenamiento e indexado.
ResponderEliminarLa lista de deseos de un tecnópata aficionado a las plumas. Hay que saber utilizar lo mejor de cada mundo.
Un abrazo.
Como se dice más adelante, la evolución tecnológica de la estilográfica es limitada pues ha llegado a un estadio muy avanzado, teniendo en cuenta los aspectos esenciales del instrumento. Solo las casas japonesas y, en especial, Sailor y Pilot, optan por la innovación. El resto suelen ser mejoras funcionales pero no mecánicas o, al menos, no trascendentales. Un abrazo, Rafael.
EliminarYo creo que cuando una tecnología está madura, está prácticamente todo inventado, pocas innovaciones van a venir de ahora en adelante. Y más si tenemos en cuenta que, objetivamente hablando, una pluma es mucho menos práctica que un bolígrafo o un roller, y que los pocos que escribimos con ella no hacemos por nostalgia y/o un cierto romanticismo.
ResponderEliminarYo soy de los que piensan que las plumas son muy útiles y prácticas. No soy capaz de escribir con un bolígrafo sin que, al poco tiempo, los dedos se me agarroten. Además, está todo el romanticismo al que aludes, que no es poca cosa. Un abrazo
EliminarHagamos un ejercicio teórico, si fuéramos ingenieros y nos dedicáramos a diseñar estilográficas, ¿qué nos gustaría crear que no se hubiera hecho ya?, no me refiero a nivel estético, sino a nivel práctico y funcional, para mejorar el desempeño de las plumas actuales. A mí particularmente no se me ocurre nada, una pluma es lo que es, y no da mucho más de si.
ResponderEliminarHola Alfonso.
EliminarLo principal en mi opinión sería que todo lo que pusieras en un papel quedara transcrito, reconocido y etiquetado en un sistema informático. Los tablets, surfaces, lo que sea, no tienen una sensación real de escritura por muy sensibles a la presión que sean sus punteros. Por otra lado, el reconocimiento de caracteres no sería una solución completa, por cuanto en una nota en papel solemos hacer dibujos, relaciones con flechas, formatos con determinado sentido, etc. Soluciones como onenote van en ese camino, pero no se escribe en absoluto igual sobre un cristal con un trozo de plástico.
En resumen, una pluma que simultáneamente sea una estilográfica al uso con un respaldo informático que le dé las facilidades que eso implica.
La carta a los reyes, en resumen. Para canalizar líquido de un depósito hacia un plumín o viceversa desde luego la cosa está más que madura. En materiales se va avanzando, pero es estética, no funcionalidad.
Desvaríos, probablemente... Aunque alguna necesidad en este sentido creo que hay. Soluciones como las de wacom, staedler, incluso moleskine tratan de aunar soporte físico con informática desde distintos enfoques. Pero no hay un producto redondo todavía.
El tiempo dirá.
Un saludo.
La solución podría estar en reeditar viejas glorias de Parker, Waterman….para los nostálgicos y hacer más accesible las plumas baratas de buena calidad con cartuchos Universales para la gente práctica y menos entendida como las Parker Vector, Kaweco Sport, Lamy Safari, Pelikan Student….
EliminarTodo esto que comentas lo desarrollarán acoplado a un bolígrafo, la tecnología puntera y las plumas son conceptos antagonicos, y así radica la mayor parte de su encanto. Piensa que estamos usando el resultado de siglos de evolución en la antigua pluma de ganso, hemos llegado a un punto en el que el desarrollo del concepto ha llegado al límite.
EliminarEn desarrollo de nuevos materiales no sólo es estética, por ejemplo podrían investigar nuevas aleaciones de metal que mejoraran la flexibilidad y el rendimiento del plumín, pero ya serían mejoras marginales.
EliminarDe acuerdo en los materiales, Alfonso.
EliminarRespecto a la parte del boligrafo, albergo la esperanza de que la capacidad de aceptar pagar un importe elevado por un útil de escritura ponga a los aficionados a la estilográfica como un objetivo para esos fabricantes. Aunque como ya decía era un desvarío. No me tomo muy en serio cuando formulo este deseo.
Lo que dice Apolino está muy en línea con la tendencia del mercado. El segmento económico es más que digno. Ahora depende de que la caligrafía no se relegue en los planes de estudios.
Un saludo
En general, el concepto de la estilográfica ha alcanzado un nivel de desarrollo total. Quizá no en los plumines pero, en esencia, las plumas admiten poca evolución que no sea ya estética. Hay muchos productos así, como las pinzas para la ropa, que son iguales desde hace decenas de años sin que nadie haya podido sustituirlas por algo diferente. Hay productos cuyo diseño y adaptación funcional están tan bien conseguidos que no se puede ir mucho más allá. Un saludo a todos
EliminarInteresante entrada e interesante blog, muy interesante.
ResponderEliminarPor casualidad, dí con este blog semanas atrás y no paro de disfrutar de tan interesantes artículos.
Enhorabuena ¡¡¡ Un asiduo lector
Gracias Jose Maria, un cordial saludo.
EliminarQue buen artículo, este se me había escapado y es de los que me gustan. muy bueno, Pedro.
ResponderEliminarGracias Iván; me alegra que te guste. Un fuerte abrazo
EliminarHola a todos, recién desembarcado en la afición estilográfica, también me preguntó el porqué de la fascinación que nos invade. Pienso en el acto de la escritura, manual y artesano, donde dejamos en cada trazo una parte de nuestra personalidad y carácter. Ello precisa también de un instrumento personal, con el que vehiculizamos lo que pretendemos explicar. La estilográfica es una prolongación de nosotros mismos, esa mano alargada que avanzó a la idea sobre el papel. Ahí llega el matrimonio de la estética con la función, y éste sí,suele ser para siempre. La poligamia admitida en la escritura es una realidad que quizá traduzca algún sentimiento. Quizá la pasión juegue en ese campo. Por no hablar de las tintas, en adaptación a plumines, y traductoras de emociones tan diversas. Recién desembarcado en esta playa, me maravilla la capacidad infinita para las descripciones apasionadas y apasionantes que encuentro en el blog. Os felicito, y en especial a Pedro, por el tono siempre en su lugar, el conocimiento, y la iniciativa que lleva. Gracias por compartir esa pasión.
ResponderEliminarGracias por tu comentario, amigo Enric. Suscribo tus palabras que, veo, son las de otro apasionado por las estilográficas. Seguiremos viéndonos aquí siempre que lo desees y te doy nuevamente las gracias por tu amabilidad y generosidad. Un fuerte abrazo
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