El clip es un elemento esencial de la estilográfica. Los diseños de escritorio suelen carecen de ellos y en algunos mercados, como el japonés, es tradicional ofrecer numerosos modelos sin clip, fundamentalmente a causa de su decoración. Pero la inmensa mayoría de plumas llevan un clip para poder portar el instrumento cómoda y seguramente en un bolsillo y, también, para contribuir a su estabilidad sobre una superficie plana, evitando que ruede. Desde muy temprano, aunque no desde el inicio, los clips forman parte de la historia misma de la estilográfica.
Además de sus cualidades funcionales, los clips se convirtieron muy pronto en símbolos distintivos de las diferentes marcas, muchas veces identificadas por un diseño concreto, unas formas particulares o una solución imaginativa. Fueron, de esta manera, una de las mejores señas de identidad del fabricante. Todos los aficionados tenemos en nuestra memoria una buena colección de clips inolvidables, revolucionarios, o tan característicos, que la misma pluma sin ellos sería otra. Hoy vamos a repasar algunos de los mejores ejemplares de la historia de la estilográfica aunque, como suele ser habitual en este tipo de trabajos, debo recordar al curioso lector que se trata de una selección estrictamente personal, subjetiva y sentimental. Estoy seguro de cada cual tendrá sus preferencias. Ahí van las mías.
Visconti
El plumín original de las Visconti de los años 80 exhibía una impresionante belleza. Sus formas redondeadas, en forma de proa que navega hacia una ola, su increíble elegancia y un ingenioso diseño que facilitaba enormemente su uso, hicieron de este elemento un signo distintivo de la prestigiosa casa italiana. La pletina de acero que flexionaba el clip presentaba problemas de corrosión y la fabricación general resultaba cara, de modo que la casa pronto cambió el diseño por otros. Casi ninguno con la originalidad, fuerza visual y presencia del original.
(foto: Chatterleyluxuries)
Namiki
Aunque los clips con bola fueron utilizados por numerosas marcas desde que nació la industria de la estilográfica, Namiki/Pilot los ha perfeccionado hasta el extremo, convirtiéndolos en un rasgo esencial de la casa nipona. Su impresionante acabado e impecables chapado y pulido, permiten multiplicar el placer de disfrutar de las grandes piezas del fabricante japonés.
(foto: Pilot)
Parker
Si hay un clip icónico en la historia de la estilográfica es la flecha de Parker. La casa norteamericana había utilizado otros modelos en sus primeros éxitos, especialmente en las Duofold clásicas, pero la introducción del clip en forma de flecha constituyó un hito en su producción que la ha acompañado hasta nuestros días. La flecha fue imitada hasta la saciedad por infinidad de competidores en los años 30 y siguientes del pasado siglo y la casa titular lo ha aplicado a numerosos modelos, desde las Vacumatic hasta las Vector, pasando por múltiples modificaciones del diseño original. Un clásico.
(foto: penbox.co.uk)
Montblanc Serpiente
Los antiguos stoppers de las viejas plumas de ebonita de finales del siglo XIX y primeros del XX se convirtieron en clip en forma de serpiente en la Rouge et Noir de 1916 y las Montblanc de los años 20, por ejemplo en la nº 25 y la 35. El diseño se recuperó para la edición limitada Agatha Christie y la moderna reedición de la Rouge et Noir. Por otra parte, este hermoso motivo ha sido utilizado por multitud de otras marcas, desde Edison hasta Danitrio pasando por chinas de todo tipo.
Waterman
Los clips de las primeras Waterman era pequeños y se colocaban sobre la mitad del capuchón en lugar de sobre el extremo superior, lo que hacía que la pluma, en el bolsillo, sobresaliese notablemente del borde de la tela. Pero el diseño corto con los dos remaches resultaba muy original y estéticamente agraciado, lo que le otorgó mucho éxito y, sobre todo, una identificación directa con el fabricante. Fue uno de los primeros clips patentados con imagen de marca.
(foto: peytonstreetpens)
Omas
El clip con la rueda tampoco fue un invento de Omas, pero sí fue la casa italiana la que lo convirtió en una de sus señas de identidad, especialmente al aplicarlo a su gama alta, como la Paragon. La absoluta perfección y extraordinaria elegancia de estos clips realzaban los prodigiosos celuloides de las mejores Omas. Pese a que la casa utilizó otros modelos de clip, nunca consiguió igualar la incontestable belleza de estos clásicos.
(foto: Chatterleyluxuries)
Sheaffer militar
Los clips Sheaffer nunca me parecieron especialmente atractivos, pese a su originalidad. Sin embargo, uno de los más curiosos e inolvidables era el llamado militar, que evitaba que la pluma sobresaliese del bolsillo de la guerrera al permitir que entrase en él hasta el extremo mismo del capuchón. De esta manera, se podía cerrar totalmente la solapa del bolsillo manteniendo así la uniformidad reglamentaria. Era un clip pequeño, poco esbelto , pero muy bien pensado y funcional. Se ha ocnvertido en una reminiscencia de tiempos pasados y entrañables,
Pelikan
Otro clip convertido en genuino símbolo de una marca es el de Pelikan. No fue de los primeros que la marca utilizó, y así se ve en la serie 100, pero el pico de ave que pronto introdujo en la gama Souverän, desplazó a casi cualquier otra alternativa en su alta gama. El clip ha sufrido numerosas variaciones a lo largo de los años pero sigue siendo un modelo de funcionalidad, elegancia y estilo.
(foto: Chatterleyluxuries)
Lamy
La casa alemana (hoy japonesa) siempre destacó por sus diseños innovadores y por su racionalismo estético. Sus modelos son ejemplo de depuración de líneas, modernismo constructivo y eficiencia global. La Safari se ha convertido en una pluma paradigmática en la gama de acceso y su relación calidad/precio sigue siendo difícil de igualar. el clip de la Safari, absolutamente revolucionario cuando salió, se ha convertido también en todo un patrón estilístico, inconfundiblemente unido a la marca y hoy copiado hasta la saciedad.
Kaweco
La veterana casa alemana fue innovadora al ofrecer un clip extraíble para su clásico modelo Sport que, además, se compraba aparte. Su ingenioso diseño y su excelente funcionalidad, lo han convertido también en un carnet de identidad de la marca. Incluidas ediciones especiales de todo tipo, hoy se ofrece en diversos acabados, diseños y materiales, todos inconfundibles.
Conway-Stewart
La casa inglesa siempre se caracterizó por fabricar plumas elegantes con acabados de calidad. En sus diversas etapas de vida, muerte y resurrección, supo mantener, como seña de identidad reservada a sus mejores piezas, el inconfundible clip ligeramente curvado con remate en forma de diamante, tan asociado a esta casa. Es un clip muy esbelto y elegante que realza la belleza natural de las plumas inglesas. De todos los modelos históricamente usados por la marca, es el que más la caracteriza.
(foto: Chatterleyluxuries)
Montblanc 139
Llegamos al final con uno de los clips más icónicos de la historia de la estilográfica. La 139 es una pluma que casi pertenece al campo de lo quimérico. Su original clip no fue reproducido salvo en contadas ocasiones y solo volvió al mercado a raíz del éxito de la Hemingway que la recreaba. A partir de ahí se puede ver en diversas marcas que intentan aprovechar la incontestable belleza de este modelo clásico e intemporal.
(fotos: Pinterest y Chatterleyluxuries)
A veces olvidamos que la personalidad de una pluma no reside en su desempeño sino en su imagen. Por eso hay plumas hermosas y plumas que no lo son tanto. Las estilográficas son instrumentos limitados en cuanto a su tamaño pero no tanto respecto a sus posibilidades estéticas; de ahí deriva la infinidad de diseños y ediciones en torno a unas formas necesariamente simples si quieren ser funcionales. El clip es un elemento funcional de las plumas y, al mismo tiempo, uno de sus rasgos estéticos más reconocibles y que les aporta un gran porcentaje de su personalidad. Por esa razón ha sido siempre objeto de cuidadosa atención por parte de la industria. Que así siga siendo.
Excelente entrada , como de costumbre en este excelso blog. Personalmente a mi me gusta mucho el clip con forma de puente de las Visconti mas modernas, aunque el antiguo que luce la Copernicus esta muy bien.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu comentario. Estoy de acuerdo en que los modernos clips de Visconti son atractivos aunque me temo que no tanto como los antiguos. Un cordial saludo
EliminarSiempre agradable leerle. Muy interesante entrada. A mí de chaval me fascinaba el clip de la Parker de mi abuelo, y yo creo que en parte por eso me aficioné a las estilográficas. Un abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias por sus amables palabras amigo Joker. en efecto, la flechita de Parker forma parte de la memoria de muchos estilófilos de pro. Un saludo muy cordial, amigo mío
EliminarExcelente entrada sobre un elemento que normalmente está en segundo plano. Nunca uso el clip, sin embargo lo considero importante desde el punto de vista del diseño, ya lo hemos asociado la imagen de una estilográfica. Tampoco hay que olvidar su funcionalidad accesoria de freno para evitar que rueden las plumas cilíndricas. Curiosamente, he pedido recientemente una pluma china sin marca atraído por su plumín Schmidt, el material en que está hecha —PEI— y ¡el clip! Se trata de una bella pieza hecha de titanio. Un cordial saludo.
ResponderEliminarMuchas gracias por su comentario amigo Miguel. Un cordial saludo
EliminarExcelente entrada, como todas las suyas. Muchas gracias por su esfuerzo, trabajo y sus agudas reflexiones.
ResponderEliminarPersonalmente, me encanta el diseño que comenta de Omas, que ha sido además, adoptado, copiado, o como quiera decirse, por otras marcas italianas, como Delta.
Otro que me parece un prodigio de diseño y funcionalidad es el clip de algunas Graf von Faber-Castell, como el modelo Anello.
Un saludo.
Gracias por sus amables palabras, estimado Javier. Efectivamente, los clips de las GVFC son de los más atractivos hoy en día. Deberían estar aquí aunque se trata de un diseño que me pareció relativamente moderno y por eso no lo añadí, aunque me arrepiento. Un cordial saludo
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