Sailor tiene tan diversificada su oferta que parece capaz de presentar una estilográfica para cada necesidad con apenas una nimia diferencia de precio. Casi podría decirse que cualquier modificación en sus modelos básicos, conlleva la aparición de una nueva pluma que solo se diferencia de las demás en un par de componentes específicos y en un precio ajustado al cambio.
Ya hemos visto que la gama 1911, el caballo de batalla de la marca japonesa, gira en torno a la llamada 1991 standard, una pluma de reducido tamaño, plumín de oro y sobria apariencia, que se puede encontrar por un precio inferior a los 100 euros en muchas tiendas de internet.
Por encima de la estándar están la Large y la KOP. Por debajo, se coloca, en primer lugar, la Promenade, que ya examinamos aquí. Se trata de una pluma sustancialmente idéntica a la normal aunque más barata, con pequeños cambios en el diseño, y ligeras modificaciones morfológicas que la distinguen. Ademas, se presenta en colores y acabados más desenfadados que sus hermanas mayores.
Otro escalón inferior lo ocupa la pluma que hoy presento. La Procolor 500 sigue siendo, en esencia, una 1911 estándar aunque con algunas diferencias que le confieren un lugar propio en el catálogo de la marca nipona y, sobre todo, un precio aún más contenido que apunta a economías un poco más débiles.
Siendo una pluma barata, destinada a un público juvenil, la Procolor se viste de colores mucho más llamativos que sus hermanas mayores. En principio, se ofrece en cuatro:
(foto: Sailor)
Pero, además, Sailor ha comercializado una serie denominada shikisai que significa color y que se divide en cuatro opciones ajustados a las cuatro estaciones del año.
(foto: Sailor)
El invierno es la estación que sirve de motivo a esta preciosa Hoshizuku; representa un cielo nocturno cuajado de estrellas.La hermosa resina PMMA con la que está construida, está salpicada de multicolores puntos brillantes que relucen al trasluz sobre un fondo azul marino muy oscuro.
El efecto visual es muy parecido el raden aunque, como es lógico en este caso, no se trata de madreperla sino de resina con partículas.
La pluma es del mismo tamaño que una 1991 estándar. Cerrada, resulta unos milímetros más corta que una Promenade e igual que la estándar. De arriba abajo, vemos la Procolor, la Promenade y la 1911 Estándar.
Cerradas, las tres plumas se diferencian, sobre todo, por los remates más apuntados de la estándar y la Procolor, y los domos casi de medio punto de la Promenade . El clip de la Promenade también es específico mientras que los otros dos son iguales.
Abierta, las diferencias son menores. Sobre todo, se ve que el plumín es claramente distinto en la Procolor, mucho más paralelo y estrecho de hombros, así como con un dibujo más sencillo.
La pluma se presenta en la misma caja azul que sus hermanas mayores y con la misma documentación y accesorios.
Los adornos de la Procolor son rodiados y algo más simples que en los demás modelos. El anillo inferior del capuchón es único y más sencillo de diseño. En el cuerpo, no hay anillo en su parte inferior.
El capuchón se coloca por medio de una rosca muy eficaz. El clip, el que usan otras plumas de la c colección, especialmente las que lucen colores especiales dentro de la gama 1911 estándar, es muy resistente y práctico, sin adornos ni las nervaduras que son propias de la 1991 Large.
El plumín es la principal diferencia con las demás plumas de la colección. Se trata de un plumín de acero con un diseño notoriamente distinto del estándar. Es más estrecho, estilizado y arqueado que los otros.
Pese a su sencillez, está primorosamente realizado y ajustado. El grabado, aunque menos completo que los de oro, es vistoso y está muy bien ejecutado. El alimentador es el estándar de la marca, una pieza de plástico pero de enorme calidad que contribuye con mucho al magnífico desempeño de esta estilográfica.
La carga se hace por cartucho/convertidor. Es el universal de Sailor, con medida específica.
La escritura con la Procolor es tan perfecta como cabría esperar. El plumín Sailor es un prodigio de suavidad y dulzura. Siendo un punto fino, traza con perfección y soltura incluso en la escritura más rápida. siendo la pluma ligerísima, resulta muy cómoda de usar y transportar.
Aparte de la colección 1911 y siempre en el rango de precios inferior a los 100 euros, Sailor ofrece también los modelos Reglus, Lecoule y High Ace Neo, todos provistos de plumín de acero y precios que rondan los 70, 35 y 15 euros respectivamente.
La Procolor se vende por 40 euros aproximadamente. Esto la coloca en el rango de una TWSBI Eco, por ejemplo, una pluma de naturaleza radicalmente distinta y que carga por pistón. No me parecen estilográficas fácilmente comparables pero es indudable que la Sailor goza de la legendaria perfección de los plumines de la casa y de la clásica belleza de la serie 1911.
Ya hemos visto que la gama 1911, el caballo de batalla de la marca japonesa, gira en torno a la llamada 1991 standard, una pluma de reducido tamaño, plumín de oro y sobria apariencia, que se puede encontrar por un precio inferior a los 100 euros en muchas tiendas de internet.
Por encima de la estándar están la Large y la KOP. Por debajo, se coloca, en primer lugar, la Promenade, que ya examinamos aquí. Se trata de una pluma sustancialmente idéntica a la normal aunque más barata, con pequeños cambios en el diseño, y ligeras modificaciones morfológicas que la distinguen. Ademas, se presenta en colores y acabados más desenfadados que sus hermanas mayores.
Otro escalón inferior lo ocupa la pluma que hoy presento. La Procolor 500 sigue siendo, en esencia, una 1911 estándar aunque con algunas diferencias que le confieren un lugar propio en el catálogo de la marca nipona y, sobre todo, un precio aún más contenido que apunta a economías un poco más débiles.
Siendo una pluma barata, destinada a un público juvenil, la Procolor se viste de colores mucho más llamativos que sus hermanas mayores. En principio, se ofrece en cuatro:
(foto: Sailor)
Pero, además, Sailor ha comercializado una serie denominada shikisai que significa color y que se divide en cuatro opciones ajustados a las cuatro estaciones del año.
(foto: Sailor)
El invierno es la estación que sirve de motivo a esta preciosa Hoshizuku; representa un cielo nocturno cuajado de estrellas.La hermosa resina PMMA con la que está construida, está salpicada de multicolores puntos brillantes que relucen al trasluz sobre un fondo azul marino muy oscuro.
El efecto visual es muy parecido el raden aunque, como es lógico en este caso, no se trata de madreperla sino de resina con partículas.
La pluma es del mismo tamaño que una 1991 estándar. Cerrada, resulta unos milímetros más corta que una Promenade e igual que la estándar. De arriba abajo, vemos la Procolor, la Promenade y la 1911 Estándar.
Cerradas, las tres plumas se diferencian, sobre todo, por los remates más apuntados de la estándar y la Procolor, y los domos casi de medio punto de la Promenade . El clip de la Promenade también es específico mientras que los otros dos son iguales.
Abierta, las diferencias son menores. Sobre todo, se ve que el plumín es claramente distinto en la Procolor, mucho más paralelo y estrecho de hombros, así como con un dibujo más sencillo.
La pluma se presenta en la misma caja azul que sus hermanas mayores y con la misma documentación y accesorios.
Los adornos de la Procolor son rodiados y algo más simples que en los demás modelos. El anillo inferior del capuchón es único y más sencillo de diseño. En el cuerpo, no hay anillo en su parte inferior.
El capuchón se coloca por medio de una rosca muy eficaz. El clip, el que usan otras plumas de la c colección, especialmente las que lucen colores especiales dentro de la gama 1911 estándar, es muy resistente y práctico, sin adornos ni las nervaduras que son propias de la 1991 Large.
El plumín es la principal diferencia con las demás plumas de la colección. Se trata de un plumín de acero con un diseño notoriamente distinto del estándar. Es más estrecho, estilizado y arqueado que los otros.
Pese a su sencillez, está primorosamente realizado y ajustado. El grabado, aunque menos completo que los de oro, es vistoso y está muy bien ejecutado. El alimentador es el estándar de la marca, una pieza de plástico pero de enorme calidad que contribuye con mucho al magnífico desempeño de esta estilográfica.
La carga se hace por cartucho/convertidor. Es el universal de Sailor, con medida específica.
La escritura con la Procolor es tan perfecta como cabría esperar. El plumín Sailor es un prodigio de suavidad y dulzura. Siendo un punto fino, traza con perfección y soltura incluso en la escritura más rápida. siendo la pluma ligerísima, resulta muy cómoda de usar y transportar.
Aparte de la colección 1911 y siempre en el rango de precios inferior a los 100 euros, Sailor ofrece también los modelos Reglus, Lecoule y High Ace Neo, todos provistos de plumín de acero y precios que rondan los 70, 35 y 15 euros respectivamente.
La Procolor se vende por 40 euros aproximadamente. Esto la coloca en el rango de una TWSBI Eco, por ejemplo, una pluma de naturaleza radicalmente distinta y que carga por pistón. No me parecen estilográficas fácilmente comparables pero es indudable que la Sailor goza de la legendaria perfección de los plumines de la casa y de la clásica belleza de la serie 1911.
La Twsbi eco de mi esposa la uso más yo, (yo no tengo ninguna molestia al usarla es una pluma extraordinaria), pero tener una Sailor por el precio de una Twsbi llama mucho mi atención. Creó que pecare de nuevo.
ResponderEliminarGracias por tus palabras, Miguel, y felicidades por la decisión. Estoy seguro de que la disfrutarás. Un fuerte abrazo.
EliminarQuisiera consultarte si el plumin de la Procolor es el mismo que el de la Lecoule. Y puestos a preguntar dado la comparativa que has hecho con la Twisbi, con que pluma te quedarías basandonos principalmente en la suavidad del plumin: Procolor, Lamy Studio, Pilot Prera o Faber Castell Ambition. Un saludo y encantado de leerte.
ResponderEliminarGracias por tu comentario, amigo Miguel. Los plumines de ambas plumas no son iguales. El de la Lecoule es mucho más sencillo aunque su rendimiento sigue siendo muy bueno. De las plumas que mencionas, yo elegiría, por este orden: Procolor, Ambition, Prera y Studio. Hay que notar que no hay grandes saltos entre ellas pues cualquiera da un magnífico resultado funcional. Un cordial saludo.
EliminarUn plumin de acero de buena calidad y pluma de resina vs metal, hacen que independientemente de precio, sin son unos pocos euros, prefiera la la resina. Lo digo porque la competidora más justa para esta bella Sailor en Japón debería de ser la Cocoom (Metropolitan). Pero la ligereza del material es algo que la mano agradece al final. Bella entrada y ejemplares. Gracias.
ResponderEliminarMe pasa lo mismo, querido Leonardo. No obstante, aunque el precio de la Cocoon es mayor en Japón que la Metropolitan en USA o la Urban en Europa, me parece que las rivales naturales de esta Sailor son la Pilot Prera o, en Platinum, la Maestro. Un fuerte abrazo, amigo mío.
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