Hace apenas un par de años, una pequeña empresa escocesa se convirtió en una kickstarter de éxito: una pluma minimalista, de patentes inspiración japonesas y líneas minimalistas, se convirtió en un pequeño fenómeno de ventas que ha consolidado a Namisu como una sólida empresa a pesar de su reducido tamaño.
Namisu es, según dice la propia empresa, un grupo de diseñadores radicados en Fife, un concejo escocés cercano a Edimburgo. Allí, en el distrito de Kirkcaldy, Namisu fabrica unas plumas singulares que han conseguido el favor del público gracias a un diseño muy particular y a unos precios relativamente contenidos.
La Nova se presenta muy bien empaquetada en una caja negra, simple y atractiva. Es algo más elaborada, pero me recuerda a la de las Pilot Metropolitan.
No viene acompañada de documentación alguna pero sí de una funda de falso terciopelo que se cierra con un cordón.
Esta pluma es la primera que fabricó Namisu y, a mi parecer, sigue siendo la más agraciada. El modelo posterior, Orion, ha perdido, en alguna medida, la originalidad del concepto inicial.
La Nova es una pluma de gran tamaño, casi igual que el de una Lamy Safari. Mide 139 mm aunque sus remates cónicos la hacen parecer más corta.
El mecanizado de las piezas de metal es de gran calidad.
Se trata de una pluma de diseño extraordinariamente limpio que recuerda inevitablemente a las Nakaya y, más concretamente al modelo Piccolo. Pero la Nova es 10 mm más larga y considerablemente más afilada de líneas en sus extremos.
Por lo demás, es una pluma con una exquisita pureza de líneas a las que no interrumpe adorno ni elemento alguno. No hay clip, ni anillos ni grabado de ninguna clase. Solo metal.
El capuchón es a rosca, perfectamente ejecutada, que sujeta firmemente la pieza en un cuerpo igualmente ponderoso en el que se ajusta la boquilla y un conjunto Schmidt con un plumín Bock de acero.
Al principio, las Namisu no se servían ni con un cartucho de recambio pero actualmente, se entregan con un convertidor Schmidt.
Las primeras Nova se comercializaron exclusivamente en diferentes metales. Recientemente se ha comenzado a vender una versión en ebonita, exactamente igual a sus hermanas, pero muchísimo más ligera y de mayor precio que ha tenido aun éxito fulgurante hasta el punto de haberse agotado en el catálogo de la marca.
La Nova, es una pluma mecanizada a partir de un bloque sólido de metal: el cuerpo, el capuchón y la boquilla. Tampoco hay en el interior adorno ni marca de ningún tipo, solo piezas que parecen pertenecer a una maquinaria industrial, sólidas y contundentes.
La limpieza del diseño y el metal en que están fabricadas, hace que las Nova exhiban una presencia robusta, maciza y corpulenta. En algunos acabados, anuncian que se trata de herramientas pesadas.
Porque la principal característica de las Nova, además de su belleza, es su peso. Hay tres versiones, de menor a mayor: aluminio, titanio y bronce. La primera pesa 27 gr., la segunda 40 gr. y la tercera, unos impresionantes 89 gr.
La de aluminio resulta una pluma normal, la de titanio resulta claramente corpulenta y la de bronce es todo un peso pesado, prácticamente imposible de gobernar para otra cosa que no sea una firma o el garabateo de unas notas cortas.
La falta de clip en todas y el excesivo peso en algunas, hacen que estas plumas sean poco adecuadas para ser llevadas en el bolsillo de la chaqueta. O se guardan en estuches de cuero o es mejor usarlas en el escritorio.
En acción, al menos la de aluminio, es una pluma ligera y extremadamente cómoda de usar. La boquilla es larga y confortable y no es necesario colocarle el capuchón para hacer de ella un instrumento de buen tamaño para una presa eficaz.
Estas plumas se venden por precios que rondan los 80 euros cada una. Es un precio justo habida cuenta de la calidad de su fabricación y de su incontestable belleza. Quizá se encuentre en el límite, habida cuenta de que por el mismo dinero, poco más o menos, se pueden conseguir una Platinum 3776 Century o una Pilot 74 con el plumín de oro. Pero el desempeño de las escocesas es bueno, su originalidad es evidente y la eficacia del conjunto Schmidt, absolutamente incontestable.
Las versiones en titanio y, sobre todo, en bronce, son para coleccionistas, culturistas, o aficionados al heavy metal. Bellos objetos, no demasiado prácticos, pero siempre atrayentes.
Namisu es, según dice la propia empresa, un grupo de diseñadores radicados en Fife, un concejo escocés cercano a Edimburgo. Allí, en el distrito de Kirkcaldy, Namisu fabrica unas plumas singulares que han conseguido el favor del público gracias a un diseño muy particular y a unos precios relativamente contenidos.
La Nova se presenta muy bien empaquetada en una caja negra, simple y atractiva. Es algo más elaborada, pero me recuerda a la de las Pilot Metropolitan.
No viene acompañada de documentación alguna pero sí de una funda de falso terciopelo que se cierra con un cordón.
Esta pluma es la primera que fabricó Namisu y, a mi parecer, sigue siendo la más agraciada. El modelo posterior, Orion, ha perdido, en alguna medida, la originalidad del concepto inicial.
La Nova es una pluma de gran tamaño, casi igual que el de una Lamy Safari. Mide 139 mm aunque sus remates cónicos la hacen parecer más corta.
El mecanizado de las piezas de metal es de gran calidad.
Se trata de una pluma de diseño extraordinariamente limpio que recuerda inevitablemente a las Nakaya y, más concretamente al modelo Piccolo. Pero la Nova es 10 mm más larga y considerablemente más afilada de líneas en sus extremos.
Por lo demás, es una pluma con una exquisita pureza de líneas a las que no interrumpe adorno ni elemento alguno. No hay clip, ni anillos ni grabado de ninguna clase. Solo metal.
El capuchón es a rosca, perfectamente ejecutada, que sujeta firmemente la pieza en un cuerpo igualmente ponderoso en el que se ajusta la boquilla y un conjunto Schmidt con un plumín Bock de acero.
Al principio, las Namisu no se servían ni con un cartucho de recambio pero actualmente, se entregan con un convertidor Schmidt.
Las primeras Nova se comercializaron exclusivamente en diferentes metales. Recientemente se ha comenzado a vender una versión en ebonita, exactamente igual a sus hermanas, pero muchísimo más ligera y de mayor precio que ha tenido aun éxito fulgurante hasta el punto de haberse agotado en el catálogo de la marca.
La Nova, es una pluma mecanizada a partir de un bloque sólido de metal: el cuerpo, el capuchón y la boquilla. Tampoco hay en el interior adorno ni marca de ningún tipo, solo piezas que parecen pertenecer a una maquinaria industrial, sólidas y contundentes.
La limpieza del diseño y el metal en que están fabricadas, hace que las Nova exhiban una presencia robusta, maciza y corpulenta. En algunos acabados, anuncian que se trata de herramientas pesadas.
Porque la principal característica de las Nova, además de su belleza, es su peso. Hay tres versiones, de menor a mayor: aluminio, titanio y bronce. La primera pesa 27 gr., la segunda 40 gr. y la tercera, unos impresionantes 89 gr.
La de aluminio resulta una pluma normal, la de titanio resulta claramente corpulenta y la de bronce es todo un peso pesado, prácticamente imposible de gobernar para otra cosa que no sea una firma o el garabateo de unas notas cortas.
La falta de clip en todas y el excesivo peso en algunas, hacen que estas plumas sean poco adecuadas para ser llevadas en el bolsillo de la chaqueta. O se guardan en estuches de cuero o es mejor usarlas en el escritorio.
En acción, al menos la de aluminio, es una pluma ligera y extremadamente cómoda de usar. La boquilla es larga y confortable y no es necesario colocarle el capuchón para hacer de ella un instrumento de buen tamaño para una presa eficaz.
Estas plumas se venden por precios que rondan los 80 euros cada una. Es un precio justo habida cuenta de la calidad de su fabricación y de su incontestable belleza. Quizá se encuentre en el límite, habida cuenta de que por el mismo dinero, poco más o menos, se pueden conseguir una Platinum 3776 Century o una Pilot 74 con el plumín de oro. Pero el desempeño de las escocesas es bueno, su originalidad es evidente y la eficacia del conjunto Schmidt, absolutamente incontestable.
Las versiones en titanio y, sobre todo, en bronce, son para coleccionistas, culturistas, o aficionados al heavy metal. Bellos objetos, no demasiado prácticos, pero siempre atrayentes.
La de ebonita sí riene referencias a namisu. Creo recordar en los topes del capuchón y el cuerpo que no son de ebonita sino metálicos. Me parece mucho más elegante que las metálicas. El fallo que le veo a este modelo es la falta de algo que impidan que rueden por la mesa. Les he preguntado si pensaban desarrollar algo y me han contestado que no. En la de ebonita una caída sería fatal para la pluma. En la de bronce sería fatal para el pavimento. Si alguien tiene alguna sugerencia que no sea el clip de serpiente se lo agradecería. Por lo menos esta vez no me has hecho pecar. Porque ya había pecado, claro.
ResponderEliminarGracias por tu comentario. Rafa. En efecto, la de ebonita tiene los remates cónicos en metal de color plateado incluyen una pequeña leyenda con el nombre de la marca. Además, la rosca del cuerpo, es también de color plateado. Pese a la mejora en cuanto al material, me sigue gustando más la idea original, más simple y pura aunque, como bien dices, es arriesgado dejarlas desatendidas sobre la mesa. Es lo que pasa con muchas otras plumas sin clip. A mí este detalle no me importa porque estoy habituado a usar un reposaplumas, pero reconozco que es un peligro. Un abrazo
EliminarMuy interesante y útil la reseña, especialmente porque MassDrop está ofreciendo la versión en bronce por $60, que al cambio y con portes deben ser menos de 70€.
ResponderEliminarSi son 60 Libras, en efecto. Más o menos. Gracias por tu comentario Comes y un saludo muy cordial
EliminarHola Pedro gracias por la reseña, yo me encariñé con ambos modelos tanto por diseño como por desempeño. Pero según que recuerdo la orion, aunque con otro nombre, fue el primer diseño con el que salieron en kickstarter. Cuando ya se consolidaron con la nova retomaron el diseño para ofrecerlo con el nombre de orion.
ResponderEliminarComo recomendación cada tanto ofrecen remates de sus proptotipos o "saldos", en donde puede haber alguna diferencia de tono entre el cuerpo y el capuchón o detalles así. Yo tuve la oportunidad de comprar a mitad de precio una Nova en aluminio negro donde lo único que le veo es ligeramente más afilada en los extremos que la otra que tengo.
Saludos.
Martín
Gracias Martín. Una información útil para quien pueda estar interesado. Un saludo muy cordial
EliminarJapón en Escocia. Ya no se limita a la famosa bebida espirituosa, cuyas fábricas están en manos de nipones, sino que también es notable su influencia en éstas bellas y puras estilográficas.
ResponderEliminarPlumín de acero por 80 euros??, creo que va en contra de mis principios. No hay duda de que son hermosas, pero cualquier opción en oro contrarresta las intenciones por la estética y más si se trata de una japonesa nacida en la tierra de los Samuráis.
Gracias Pedro, no conocía estas estilográficas que devuelven el buen gusto por la pureza de diseño y por la calidad de acabados.
Gracias por tu comentario Leonardo. Como dices, el precio de estas plumas está en el límite de lo razonable aunque es forzoso reconocer que son muy atractivas. Un fuerte abrazo, amigo mío.
EliminarBuenos días Pedro, antes que nada agradecerte este blog, lleno de sabiduría y buen hacer. A mí me encantan estos diseños, como la Twsbi Micarta, y salvando las distancias, la Lamy 2000. Quisisera hacerte una pregunta, tengo alguna Jinhao 159 con plumines Pendleton, podría trasladarlos a esta pluma? Gracias y un saludo cordial. Ángel
ResponderEliminarGracias por tus amables palabras, Ángel. Tanto la 159 como la Nova usan plumines nº 6 pero el de la Nova viene incorporado a un conjunto Schmidt que se instala a rosca y que no es apropiado para la 159 cuyo conjunto plumín/alimentador se inserta a presión en la boquilla. No obstante, puedes extraer el plumín del conjunto Schmidt y sustituirlo por tu Pendleton. Costará un poco, pero puede hacerse con cuidado. Un cordial saludo.
EliminarMuchísimas gracias, Pedro! :)
EliminarDisculpa, soy nuevo aqui y quería saber si hay algún post en el que se hable de las tintas resistentes al agua.
EliminarAquí mismo se habla aunque no con una entrada monográfica. Puedes usar el buscarnos con los conceptos que más te interesen. Un cordial saludo
EliminarNo sé si me equivoco pero el estuche es muy parecido al de las Faber Castell Ambition. Antonio F.B.
ResponderEliminarLas FC usan (o usaban) dos modelos de caja: uno parecido a éste y otro, rígido y de plástico, bastante diferente. Un cordial saludo.
EliminarBellísima pluma
ResponderEliminarGracias Virginia; un saludo muy cordial.
EliminarTengo dos. La primera metálica, preciosa en su estilo, con plumín de titanio que por desgracia salió rana. Se interrumpe el flujo, a pesar de haberlo limpiado y relimpiado y probar varias tintas.
ResponderEliminarLuego compré la versión de ebonita, también preciosa, con un plumín EF que esta vez funciona a la perfección (acero esta vez).
El diseño limpio me fascina.