Opus 88 Koloro: Nuevas amistades

Tras el inesperado hiato que, por razones laborales, me ha mantenido temporalmente apartado del blog, retomo el trabajo pendiente, disculpándome ante los amables lectores por mi temporal ausencia y recompensándoles, espero de corazón, con una entrada especial dedicada a una de las marcas más interesantes y atractivas de los últimos tiempos.

Opus 88 es una conocida fábrica taiwanesa de instrumentos de escritura que fabrica material para terceros desde hace mucho tiempo. En 2018 comenzó a fabricar con su propio nombre y puso en el mercado algunas estilográficas muy originales que, casi de inmediato, han sabido hacerse un hueco importante en el mercado.

Opus 88 fabrica plumas con dos características fundamentales: son muy cómodas y gozan de una excelente capacidad. Todos sus modelos comparten una ergonomía y una facilidad de uso verdaderamente sorprendentes y, al mismo tiempo, ponen especial atención en ofrecer al usuario una capacidad de tinta muy por encima de lo habitual. Naturalmente que estas dos características no vienen solas sino que se acompañan de una calidad de fabricación extraordinaria y, finalmente,  de una belleza sobresaliente. Todo esto haría de las Opus 88 plumas  muy interesantes si no fuera porque, además, tienen un precio muy asequible que las convierte en  una de  las estilográficas con mejor relación calidad/precio del mercado. Este producto taiwanés ocupa, desde hace  algún tiempo, los puestos más altos entre las marcas más apreciadas de la industria moderna de la estilográfica.

Uno de los modelos más destacados de Opus 88, es la Koloro. Se trata de una estilográfica novedosa en muchos aspectos: los colores, la combinación de materiales, la calidad de su escritura y el sistema de carga. Pero, además, es una pieza con un desempeño excepcional, una capacidad de carga extraordinaria y una comodidad de las más acusadas del mercado.

Mi buen amigo Carlos, de Papelería Debod, ha tenido la impagable amabilidad de hacerme llegar este ejemplar para su análisis.

La Koloro se presenta en una elegante caja de cartón de color negro, protegida por una solapa marrón primorosamente impresa.

En el interior de la caja, se aprecia la pluma junto con un cuentagotas y un pequeño folleto de instrucciones en inglés, pero con buenas fotografías que ilustran sobradamente su contenido.

La Koloro es una pluma de gran impacto visual. Su diseño gira en torno a la combinación de dos materiales: la resina translúcida y la ebonita. Pero en lugar de limitar el área transparente a, por ejemplo, un simple visor en el depósito, se ha servido de un diseño de franjas en el que se alternan las secciones de ebonita con las acrílicas, en igualdad de importancia visual.

La ebonita se usa para rematar el capuchón y el cuerpo, además de conformar la parte inferior y principal del capuchón, con su rosca.

La resina translúcida, en un tono amarillo muy cálido, se reserva para la parte principal del cuerpo, una pequeña franja en el capuchón, y la boquilla.

La pluma presenta un diseño tradicional, afín a los modelos de los años 20 del pasado siglo, con líneas clásicas,  formas ahusadas y extremos cónicos muy aplanados . Es una pluma de buen tamaño, 142 mm. pero resulta sorprendentemente ligera, con apenas 22,68 gramos.

El ejemplar que muestro, en tonos amarillo-anaranjados, transmite un enorme calor cromático. La ebonita amarilla está muy matizada con minúsculas partículas, más  oscuras, que le dan profundidad y belleza.

La mecanización de la ebonita es, sencillamente, impecable.

La estética de la pluma es sumamente original. No solo por la combinación de materiales sino por el marcado carácter que le proporciona el color y sus curiosos matices, así como las transparencias y los elegantes toques metálicos que proporcionan al conjunto, en definitiva, una fortísima personalidad.

El capuchón, ahusado y con cierta forma de barrilete estilizado, se adorna con un clip metálico muy discreto y funcional, terminado en forma de gota y adornado con un moleteado longitudinal que resalta sus formas.

El capuchón exhibe un grabado con la leyenda "opus 88" como único motivo de identificación de la marca. Se une con el cuerpo a a rosca, perfectamente mecanizada.

La boquilla es de resina acrílica translúcida, como la mayoría del cuerpo. Es una pieza extraordinariamente cálida y agradable al tacto.

Las roscas de toda las piezas están muy bien trabajadas,  y el hecho de que puedan adivinarse gracias al carácter translúcido de la resina, aporta interés y originalidad a la pieza.

El pulido de la resina es igualmente impecable, formando piezas de paredes gruesas y resistentes.

El tacto de los materiales es espléndido. La ebonita sigue siendo uno de mis favoritos y la combinación con la resina resulta sumamente agradable. La pluma es, además, muy ligera, lo que favorece su uso continuado. La sección, generosa, también facilita el agarre y, en definitiva, la comodidad general en el uso.

La Koloro es un cuentagotas. Esto quiere decir que admite una ingente cantidad de tinta. Sabido es que los cuentagotas tienen algunos inconvenientes, siendo uno de ellos la posibilidad de fugas por cambios de presión en el depósito y defectuoso sellado en la unión con la boquilla. En este caso, esos problemas han sido previstos y evitados, utilizando el sistema japonés de obturación del depósito mediante un tapón accionado por un émbolo. Es exactamente el sistema que usa la Namiki Emperor, además de otros modelos clásicos japoneses. Aunque a primera vista parece un sistema de carga, se trata, en realidad, de un tapón que se acciona con la varilla sujeta al culote y que, cuando no se usa la pluma, permite sellar por completo el depósito. Aquí podemos ver la varilla sujeta al culote.

Y aquí se aprecia el tapón de goma situado en el extremo inferior de la varilla. Cuando se rosca a fondo el culote, el tapón encaja en la parte superior de la boquilla y sella el depósito. Cuando se usa la pluma, es precios desenroscar ligeramente el culote para permitir el flujo de tinta hacia el alimentador.

La pluma está dotada de un plumín nº 5 fabricado por Jowo, lo que le otorga la calidad y precisión tradicional de esta marca. Para mi gusto, resulta algo pequeño y quizá debería haber sido un número 6. Aún así, resulta visualmente equilibrado y muy discreto. Se presenta en acero pulido y con diversos grosores. 

El plumín no rompe las líneas de la pluma ni adquiere el especial protagonismo en un  modelo centrado, obviamente, en las formas y los colores. No es, por tanto, una pieza llamativa ni ostentosa. Simple y discreta eficacia germana.

El alimentador es de plástico, simple y eficaz, con un diseño curvo de los aletines, bastante original.

Como es habitual en Jowo, todo el conjunto se presenta en cartucho desenroscable lo que facilita, llegado el caso la sustitución del plumín o el uso de varias medidas en función de los gustos o necesidades del usuario.

En funcionamiento, la pluma resulta muy cómoda y ligera y la escritura, sumamente fácil. Como es tradicional en los plumines alemanes, el trazo es muy fluido, húmedo y eficaz. No hay ninguna sorpresa dersagradable. La capacidad del depósito, si bien no he llegado a agotarlo, es enorme y transmite confianza en esos momentos en los que nos enfrentamos a periodos extensos de escritura y dudamos de si será suficiente con el suministro del que disponemos. La Koloro da confianza. 

La Opus 88 Koloro es una pluma enormemente original y sumamente atractiva. Pocas cosas podrían mejorarse. Su belleza corre pareja con su eficacia y, en el panorama actual, constituye un modelo al que pocos aficionados podrán resistirse porque tiene elementos materiales, mecánicos, estéticos y funcionales de primer orden. Todo ello, además, al irresistible precio de 90 euros,  en un rango de colores a cual más interesante. Merece la pena hacer nuevas amistades como ésta.

Mi agradecimiento especial a Carlos, de Papelería Debod, por facilitarme este ejemplar y poner siempre a disposición de los estilófilos su conocimiento y extraordinario servicio.