En el año 2008, Pilot/Namiki celebró su nonagésimo aniversario. 90 años en la industria es todo un récord y, como es tradicional en la casa, se aprovechó la ocasión para poner en el mercado una pluma conmemorativa. Se llamó Toki que en japonés significa ibis coronado, un ave de singular elegancia y gran tradición en la iconografía artística nipona porque es su ave nacional. El segundo libro de historia más antiguo de Japon, el Nihon Soki (Crónicas de Japón), ya menciona al ibis. El tono rojo y anaranjado de su plumaje ha dado lugar a un color denominado Rojo-Toki.
El Ibis desapareció de los cielos japoneses en 1981 pero ha logrado reintroducirse en 1999, aunque únicamente en la isla Sado de la Prefectura de Niigata. La imagen del Ibis que utilizó Pilot simbolizaba la esperanza por un futuro venturoso.
La Toki se fabricó únicamente en dos versiones:
1) Pilot 90 Aniversario, Toki Maki-e – edición limitada a 90 piezas.
2) Pilot 90 Aniversario Toki Raden – edición limitada a 900 piezas.
La pluma que hoy presento es la segunda; una pieza menos llamativa pero exquisitamente elaborada con técnica maki-e y madreperla (raden) por el ilustre Yasunori Sakamoto, autor para Namiki de piezas tan conocidas como “Grillo”, “Glicina”, “Dios del Viento y Dios del Trueno” y "Conejos a la luz de la luna" entre otras.
De esta pluma se fabricaron 900 ejemplares. El número de cada una aparece en la parte superior del clip, en el tramo perpendicular al capuchón. En nuestro caso, como se puede apreciar, se trata del ejemplar nº 561
La pluma es de buen tamaño aunque nada excesivo: 138 mm. Su anchura máxima es de 39 mm.
El capuchón se asegura, mediante rosca, a una boquilla de resina. Tanto el cuerpo como el capuchón son metálicos, al estilo de las Namiki Yukari Royal.
La decoración de esta pluma es delicada aun siendo espectacular. Sobre un fondo de lacado urushi negro, se distinguen cuatro zonas que marcan los extremos, tanto del capuchón como del cuerpo. Las zonas interiores de ambas piezas, es decir, las que quedan contiguas cuando se cierra la pluma, están decoradas con un precioso maki-e dorado, salpicado, de cuidadísima factura.
El cuidado y el mimo en la ejecución del maki-e salpicado es digno de admiración.
En los extremos y en las partes planas, por el contrario, la decoración se ha llevado a cabo con raden, o sea, pequeña partículas de madreperla que centellean en reflejos multicolores.
La disposición de estas pequeñas partículas se distribuye sabiamente desde los extremos hasta el interior de las piezas hasta desaparecer totalmente en el lacado urushi. El efecto es cautivador.
El capuchón se adorna de un discreto anillo plateado con dos figuras de ibis grabadas sobre un fondo negro. El dibujo no estorba en absoluto la contemplación del lacado y la decoración maki-e y raden.
El clip, también plateado y muy sencillo, solo lleva grabado el nombre Pilot en su parte superior.
El plumín, de oro rodiado, es otra pieza digna de mención. No es de gran tamaño pero está bellísimamente decorado con las alas del ave en los gavilanes y el guarismo 90 en el centro. Su morfología e instalación destacan su presencia en la pluma.
El alimentador, es el típico de la marca, muy eficaz.
La pluma se carga por medio de cartucho/convertidor. Viene provista del conocido CON-70 de Pilot.
La pluma está sin usar y, por descontado, no puedo dar detalles sobre su desempeño funcional. No obstante, estas plumas son piezas de colección y no suelen ser usadas.
La Toki es una pluma excepcionalmente bella y, aunque no sea la versión de lujo del aniversario, es un ejemplar capaz de atraer todas las miradas. La maestría de Pilot-Namiki en la producción de estas pequeñas joyas, se revela en ella con toda brillantez.
La Toki se fabricó únicamente en dos versiones:
1) Pilot 90 Aniversario, Toki Maki-e – edición limitada a 90 piezas.
2) Pilot 90 Aniversario Toki Raden – edición limitada a 900 piezas.
La pluma que hoy presento es la segunda; una pieza menos llamativa pero exquisitamente elaborada con técnica maki-e y madreperla (raden) por el ilustre Yasunori Sakamoto, autor para Namiki de piezas tan conocidas como “Grillo”, “Glicina”, “Dios del Viento y Dios del Trueno” y "Conejos a la luz de la luna" entre otras.
De esta pluma se fabricaron 900 ejemplares. El número de cada una aparece en la parte superior del clip, en el tramo perpendicular al capuchón. En nuestro caso, como se puede apreciar, se trata del ejemplar nº 561
La pluma es de buen tamaño aunque nada excesivo: 138 mm. Su anchura máxima es de 39 mm.
El capuchón se asegura, mediante rosca, a una boquilla de resina. Tanto el cuerpo como el capuchón son metálicos, al estilo de las Namiki Yukari Royal.
La decoración de esta pluma es delicada aun siendo espectacular. Sobre un fondo de lacado urushi negro, se distinguen cuatro zonas que marcan los extremos, tanto del capuchón como del cuerpo. Las zonas interiores de ambas piezas, es decir, las que quedan contiguas cuando se cierra la pluma, están decoradas con un precioso maki-e dorado, salpicado, de cuidadísima factura.
El cuidado y el mimo en la ejecución del maki-e salpicado es digno de admiración.
En los extremos y en las partes planas, por el contrario, la decoración se ha llevado a cabo con raden, o sea, pequeña partículas de madreperla que centellean en reflejos multicolores.
La disposición de estas pequeñas partículas se distribuye sabiamente desde los extremos hasta el interior de las piezas hasta desaparecer totalmente en el lacado urushi. El efecto es cautivador.
El capuchón se adorna de un discreto anillo plateado con dos figuras de ibis grabadas sobre un fondo negro. El dibujo no estorba en absoluto la contemplación del lacado y la decoración maki-e y raden.
El clip, también plateado y muy sencillo, solo lleva grabado el nombre Pilot en su parte superior.
El plumín, de oro rodiado, es otra pieza digna de mención. No es de gran tamaño pero está bellísimamente decorado con las alas del ave en los gavilanes y el guarismo 90 en el centro. Su morfología e instalación destacan su presencia en la pluma.
El alimentador, es el típico de la marca, muy eficaz.
La pluma se carga por medio de cartucho/convertidor. Viene provista del conocido CON-70 de Pilot.
La pluma está sin usar y, por descontado, no puedo dar detalles sobre su desempeño funcional. No obstante, estas plumas son piezas de colección y no suelen ser usadas.
La Toki es una pluma excepcionalmente bella y, aunque no sea la versión de lujo del aniversario, es un ejemplar capaz de atraer todas las miradas. La maestría de Pilot-Namiki en la producción de estas pequeñas joyas, se revela en ella con toda brillantez.
Gracias a Ricardo por permitirme presentar esta pluma a todos los lectores.
La empresa española STYB está a punto de celebrar su 70 aniversario. Escuché (leí) rumores de que preparaba una pluma especial para este aniversario y te pregunté. ¿Podrías usar tu influencia para enterarte y confirmarlo o desmentirlo? Teniendo en cuenta que hoy es la empresa española líder en artículos de escritura, esta pluma sería muy apreciada por los coleccionistas
ResponderEliminarY algo más: ¿no merecería un apunte de nuestro admirado capitán está empresa española, siempre trabajando y batallando?
EliminarTomo nota, Juan; es una buena idea y, aunque la empresa apenas fabrica plumas, es una oportunidad hacer referencia a su trayectoria. Un saludo muy cordial
EliminarSi vas a hablar algo de STYB no olvides la STYB Minister, quizá su mejor pluma.
EliminarEn el año 2008 Pilot también lanzó la M90 para celebrar sus 90 años. Con 9000 unidades (no numerados completa el trío de plumas de esa onomástica.
ResponderEliminarLa que muestras, preciosa. Un maki-e discreto y poco ostentoso. El anillo me recuerda a las Pilot de los 80 años de la marcay a algunas gloriosas Dunhill-Namiki de los años 20 y 30 nada espectaculares y, sin embargo, impresionantes.
Gracias, capitán, por el trabajo de mantener El Pajarete vivo.
BT
Estimado Bruno, bueno saludarlo por esta vía. pronto le contactare por algunas consultas sobre unas Pilot 100 hechas en América. Fuerte abrazo
EliminarGracias por tu comentario, Maestro. Siempre es un placer saludarte. Recibe un fuerte abrazo
EliminarQue bella estilográfica. Admiro estas fantásticas piezas y por qué no decirlo, al dueño. Ricardo es un coleccionista extraordinario. Gracias a ambos por mostrarnos estas maravillas.
ResponderEliminarGracias por tu comentario Leonardo; en efecto, Ricardo es admirable por muchas cosas y también por ésta. Un fuerte abrazo
EliminarMagnífica pluma, de bellísima facturación y presencia, muy buenas fotos y mejor presentación-descripción, Pajarete... eres el mejor!!!... y,¡cómo no!, los comentarios de los bloqueros muy atinados e interesantes... que magnifico grupo!.Enhorabuena a todos, empezando por nuestro Capitán.
ResponderEliminarMucius Scaevola
Gracias por tu comentario, querido Mucius. Un fuerte abrazo, amigo mío.
EliminarPreciosa. Discreta y encantadora. Mantenga esa amistad para poder mostrarnos tan magníficos ejemplares.
ResponderEliminarSaludos.
Gracias Daniel; un fuerte abrazo.
Eliminar¡Una auténtica joya! Muchas gracias por descubrirnos este maravilloso instrumento y describrirla tan detalladamente.
ResponderEliminarUn saludo
www.miplumier.com
Gracias pot tu comentario y un fuerte abrazo.
EliminarHola a todos.
ResponderEliminarPilot tiene especial gusto cuando mete un ibis en el diseño de una estilográfica. Recuerdo una pieza de plata que Pedro presentó en otra entrada y también era un escándalo.
Me da mucha pena no haber podido apreciar el raden en vivo. A ver si algún día puedo ir a un pen show, porque todos los que hablan de esta técnica comentan que, como pasa con el celuloide, las fotografías no hacen justicia a todos los matices.
Me uno a Leonardo en el agradecimiento a Ricardo por su generosidad al compartir su excelsa colección.
Un saludo.
Espero que pronto puedas disfrutar de una pieza en "raden", amigo mío. Ciertamente es un material singular. Al próximo penshow no has de faltar. Un fuerte abrazo.
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