La rendición incondicional de Japón a las fuerzas armadas norteamericanas se formalizo el 2 de septiembre de 1945 a bordo del acorazado Missouri, fondeado en la Bahía de Tokyo. A la Ceremony of Surrender, asistió, por parte japonesa, el Ministro de Asuntos Exteriores Mamoru Shigemitsu y el, general en Jefe del Ejército japonés Yoshijiro Umezu.
La firma de la rendición, en lo que aquí importa, se llevó a cabo con plumas estilográficas. Es bien conocido que Mc Arthur utilizó seis y que regaló cinco reservándose sólo una, la que era de su mujer.
Pero por parte japonesa, cada firmante utilizó su propio instrumento sin que hasta la fecha se haya podido saber de qué modelos se trataba. Ha habido numerosos intentos por parte de especialistas para averiguarlo y ninguno ha tenido éxito. Al contrario de las plumas norteamericanas, que fueron conservadas como valiosos recuerdos del histórico acto, es más que probable que las japonesas fueran destruidas inmediatamente después y esta es la razón por la que los dignatarios nipones no usaron las que les ofrecieron sino las propias.
La primera firma la llevó a cabo Shigemitsu. Aquí se le ve con su asistente, firmando con la estilográfica que había sacado instantes antes de su bolsillo izquierdo. No es posible saber de qué marca se trata aunque creo que era una Montblanc 138 ó 139 por la forma del clip. En la fotografía no se aprecia bien, pero en la filmación oficial del evento se ve algo mejor.
Tras Shigemitsu, firmó Umezu pero tampoco es posible saber con qué modelo, aunque sí consta que tuvo dificultades para que comenzara a escribir provocándole cierta impaciencia.
Una vez más, las estilográficas formaban parte de la historia aunque se tratara del final un episodio tan luctuoso como la Segunda Guerra Mundial.
La firma de la rendición, en lo que aquí importa, se llevó a cabo con plumas estilográficas. Es bien conocido que Mc Arthur utilizó seis y que regaló cinco reservándose sólo una, la que era de su mujer.
Pero por parte japonesa, cada firmante utilizó su propio instrumento sin que hasta la fecha se haya podido saber de qué modelos se trataba. Ha habido numerosos intentos por parte de especialistas para averiguarlo y ninguno ha tenido éxito. Al contrario de las plumas norteamericanas, que fueron conservadas como valiosos recuerdos del histórico acto, es más que probable que las japonesas fueran destruidas inmediatamente después y esta es la razón por la que los dignatarios nipones no usaron las que les ofrecieron sino las propias.
La primera firma la llevó a cabo Shigemitsu. Aquí se le ve con su asistente, firmando con la estilográfica que había sacado instantes antes de su bolsillo izquierdo. No es posible saber de qué marca se trata aunque creo que era una Montblanc 138 ó 139 por la forma del clip. En la fotografía no se aprecia bien, pero en la filmación oficial del evento se ve algo mejor.
Tras Shigemitsu, firmó Umezu pero tampoco es posible saber con qué modelo, aunque sí consta que tuvo dificultades para que comenzara a escribir provocándole cierta impaciencia.
Una vez más, las estilográficas formaban parte de la historia aunque se tratara del final un episodio tan luctuoso como la Segunda Guerra Mundial.
La fuerza de la imagen y sus connotaciones deja un poco eclipsado cualquier comentario sobre la pluma, pero trataré de sacar una derivada acerca de ello.
ResponderEliminarVer al ministro japonés vestido de rigurosa etiqueta, hasta con chistera, firmando una rendición cuando Macarthur le recibió en mangas de camisa da muchas pistas del espítitu nipón y de cómo hacen las cosas. Entre otras, sus plumas.
Un saludo.
Tienes mucha razón. El japonés es un pueblo absolutamente singular y, en gran medida, admirable. Tiene muy poco que ver con nuestra historia y nuestra idiosincrasia, pero son fascinantes.
EliminarMe gusta bastante la Segunda Guerra Mundial. Tengo docenas de libros y revistas sobre el tema. Sobre el teatro del Pacífico tengo menos bibliografía, aunque la que poseo es sobre todo naval. Lo cierto es que he visto esa rendición en artículos, en vídeo, en libros y jamás reparé en la estilográfica.
ResponderEliminarNo obstante, estimado Pedro, como personaje, me sigo quedando con la sonrisa de Marilyn Monroe...
Amigo mío, ¡Cherchez la femme!
EliminarPedro, ya había leído este articulo, por demás excelente. Sin embargo me queda la duda si se sabe o esta perfectamente documentado cual o cuales fueron las plumas usadas por el lado americano. He leído que fueron 3 y que regalo 2, en fin. De igual manera leí que se trato de sendas Parker´s 51, lo cual no es descabellado. Pero no he visto una referencia clara y contundente al respecto. Podrías aclarármelo?. Gracias
ResponderEliminarAmigo Leonardo; cuantas y cuales plumas se usaron por la parte americana es un tema de debate desde hace muchos años. En realidad, se usaron varias. Nimitz usó una Parker 51 y McArthur usó varias que regaló a los presentes o, tiempo después, a algunos generales. Parece ser que la suya propia era una Duofold de los años 40, no una "Big Red"; pero también usó una vacumatic de su mujer y alguna otra inidentificable. Espero haber sido útil. Un abrazo
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