viernes, 20 de mayo de 2016

Un paseo austral

Montevideo y Buenos Aires son dos ciudades fascinantes. Su personalidad es bien distinta, pero comparten ambas un sabor inigualable. El Estuario del Plata divide estas dos joyas arquitectónicas, culturales y humanas. Viajar a una y visitar la otra es obligado para el viajero. Un ferry cruza el estuario en dos horas y media aproximadamente, acercando estos dos países y estas dos ciudades en tantas cosas hermanas.


La inconfundible silueta del Palacio Salvo de Montevideo. Es el mismo que sobrevoló el Graf Zeppelin en 1934, camino de Buenos Aires.



Siempre que viajo, procuro reservar algún tiempo para vagabundear por las calles, explorar rincones y recalar en todo tipo de tiendas y establecimientos entre los que, como cabría esperar, tienen una especial importancia las librerías y papelerías.


Un hermoso atardecer en Buenos Aires.

Tanto en Montevideo como en Buenos Aires, la proliferación de librerías de todo tipo es algo que choca al viajero europeo, tristemente acostumbrado ya a la progresiva desaparición de aquellos viejos, mínimos, templos de la cultura, puertos de embarque de tantas curiosidades e ilusiones.  En la entrañable Montevideo, a la entrada de una librería donde estaba sentado, escuché a un  mendigo decir a la señora que amablemente le socorría: "La cultura es lo que nos mantiene lúcidos".


Bellísima librería en la ciudadela de Montevideo.

Ambas ciudades conservan una reconfortante predilección por este tipo de establecimientos, aún en sus emplazamientos originales, espléndidos, antiguos pero admirablemente conservados, donde a veces se encuentra un café en el que poder reposar y tomar un refresco mientras se hojean las adquisiciones recién hechas.


Vieja librería en Florida, Buenos Aires.

Las papelerías también abundan, aunque es difícil encontrar artículos asequibles para un europeo. Las estilográficas no son frecuentes y suelen limitarse a las sempiternas Parker, Waterman y Sheaffer, casi siempre de gamas inferiores.


Algunas plumas en una papelería montevideana

Los precios llegan, en ocasiones, a triplicar a los habituales en Madrid. Los propios tenderos, con la típica socarronería porteña, desaconsejan al viajero la compra: "dejá, no vale la pena..."



Varias Lamy en una papelería de Buenos Aires.

También se ven Lamys, también a precios disuasorios, pero en algunos colores ya agotados en Europa. Una Safari normal ronda los 45 euros y una AL-star, casi 80.


Algunos cuadernos argentinos de buena calidad y precio asequible.

En cambio, se pueden encontrar algunos productos a buen precio como plumillas o cuadernos, especialmente algunos productos argentinos de buena calidad y precios asequibles.


Una económica libreta de fabricación uruguaya

Por mucho que pregunté no encontré tinta en frasco, salvo algunos tinteros Lamy en Buenos Aires. En el resto, solo pude hallar cartuchos y con muy poca variedad.


Dos hermosas plumillas encontradas en una papelería de La Recoleta, Buenos Aires.

Dejando aparte las posibles compras, es siempre un placer pasear por las históricas calles de estas preciosas ciudades, urbes inolvidables que derrochan genio y  encanto. Sus gentes, sus calles, sus cafetines, sus plazas, son un viaje a lo mejor de nuestro pasado y a lo más cálido de nuestra memoria.




11 comentarios:

  1. Estupendo y evocador artículo. En Montevideo no he estado, pero sí en Buenos Aires, tres días al principio y otros tres al final de un viaje en el que recorrimos, durante un mes, casi toda Argentina, desde la capital hasta Ushuaia. Un gran viaje, sin agencias ni organización ninguna, tan solo alquilar un coche y a recorrer kilómetros, comiendo, cenando y durmiendo donde nos apetecía. Como dices, llaman mucho la atención las librerías de Buenos Aires: antiguas pero impecablemente cuidadas, enormes y a la vez acogedoras, algunas con cafetería y, oh, sorpresa, siempre llenas de gente!!!

    Cuéntanos más de tus viajes, entrañable capitán, tus grumetes desean saber!!!

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    1. Gracias por tu comentario, querido Jose Manuel; me alegra saber que compartimos la misma admiración por esas entrañables librerías bonaerenses. Intentaré ir dando noticia de otros viajes y otras ciudades por las que suelo pasar con relativa frecuencia. Un fuerte abrazo, amigo mío.

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  2. Felicidades por andar cerca del fin del mundo!! conozco los valores de Argentina, en lo que se refiere a estilograficas. Se suceden dos fenómenos, los precios per se son caros y además se "aprovecha" del precio al turista. Lo sé por experiencia propia.
    En el caso de Chile, esto aún más caro, siendo la estilografía un hobby de extremo caro.
    Ojalá existiese la chance de hace compras a precios justos y europeos.
    Ahí le dejo estimado, un nicho que explotar.
    Saludos y nuevamente mis felicitaciones.

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    1. Interesantísimas observaciones Manuel. En efecto, parece que la estilofilia en América se ha convertido en una afición para ricos o para extravagantes cuando debería ser al contrario. un abrazo fuerte para Chile y otro muy caluroso para ti.

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  3. Esta aproximación a Bs. As. y Montevideo no hace sino acrecentar mi deseo de visitarlas. Gracias por compartirlo.

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    1. Gracias por tu comentario, amigo mío. Te aseguro que merece la pena. Un cordial saludo.

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  4. Cuando llegues a pasar a la Ciudad de México, no dejes de visitar "Papelería Miguel Ángel" ubicada en la calle 5 de mayo en el Centro Histórico, te va a encantar porque tienen ediciones especiales de muchas marcar de estilográficas (Montegrappa, Pelikan, Aurora, Caran dAche, Montblanc, Visconti, etc), puedes ver todas esas bellezas en un mismo lugar. También te recomiendo "La casa de la pluma" en Plaza Inn en San Ángel y "La casa de la estilográfica" en san Jerónimo.

    Y si te gustan los libros antiguos, la calle de Donceles está lleno de ellos, podrás encontrar verdaderas joyas.

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    1. Mil gracias por la información, amigo Vladimir. No dudes de que visitaré esos lugares y daré cuenta de ellos en cuanto viaje allí. Un fuerte abrazo, amigo mío, extensivo a todo México.

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  5. Hola Pedro, soy un antiguo y regular lector, y no me había animado a escribirte hasta ahora. Vivo en Chile, y lamentablemente, la estilofilia es una excentricidad por estas latitudes. No es que los precios sean altos, es que sólo hay productos de gama baja, salvo en las pocas tiendas MB distribuidas por los malls caros, a precios estratosféricos. Si estás en Bs As, no puedes dejar de conocer la sede de la Librería El Ateneo, un hermoso y antiguo teatro transformado en librería. Pasearse por los pasillos es una delicia, con una enorme variedad de libros y a un precio increíble (nosotros pagamos 19% de IVA por los libros en Chile). Además, dificulto que haya ciudades en las que se coma mejor que en Bs As y Montevideo

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    1. Gracias por tu comentario, amigo Claudio. Me alegra tenerte por aquí. Como ves por las fotografías, pude visitar El Ateneo, en Bs. As. y, como bien dices, es un lugar fascinante. Envidio esas librerías. En cuanto a las dificultades para ejercer de estilófilo en América, estoy de acuerdo contigo. Es una lástima que el gusto por las librerías y papelerías no se complete con la pasión por la escritura con estilográfica. Recibe un fraternal abrazo, querido amigo.

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    2. Vivo en Buenos Aires y tengo desde hace ... ¡desde siempre! afición por las estilográficas. Aquí hay lugares donde se venden piezas interesantes (pero caras) También hay sitios sin publicidad pero muy conocidos por los aficionados. , por ejemplo "Casa Pintos" en la Avenida de Mayo, cerca de su intersección con la calle Florida. Sólo se puede abonar en contado efectivo, pero los precios son justos. Entienden mucho del tema y tienen un servicio técnico de primera clase. Allí se puede encontrar desde una Parker de colección hasta una Montegrappa. Sin embargo, el lugar para por ser una tabaquería, un estanco. Si alguno viene por aquí, les recomiendo una visita. No debe haber en Buenos Aires otro lugar donde se pueda conseguir un bolígrafo Mont Blanc de los que utilizaban el repuesto viejo y que además se lo entreguen con un adaptador para utilizar el actual...

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